Si te has sentidos falto de energía, con poca fuerza y sin ganas de hacer nada, es probable que tengas astenia. La astenia es la falta de fuerza física, muscular, cansancio mental, un decaimiento inusual y una debilidad generalizada que trae como consecuencia múltiples síntomas que impiden realizar actividades cotidianas, concentrarse y rendir al máximo.
¿Qué es la astenia?
El mal humor, la falta de ánimo y la somnolencia pueden estar presentes a diario cuando se padece astenia. Sin embargo, es importante diferenciar entre la fatiga, que es fisiológica, y la astenia, que es patológica. La astenia es un cansancio crónico que puede convertirse en enfermedad si no es detectada y tratada a tiempo. La fatiga, por otro lado, suele desaparecer al experimentar un descanso profundo después de un sueño reparador o al tomar unas vacaciones. Quienes tienen Diabetes tipo 1, tipo 2 o gestacional, son proclives a padecer astenia, sobre todo si hay un mal control de la glucosa. No obstante, no es exclusiva de las personas con esta condición, pues también puede ser resultado de la deficiencia de una enzima llamada citrulina que se encarga de estimular la energía celular.
Factores de riesgo y Primeras señales
Estos son los tres factores de riesgo para padecer astenia:
1- Ser diagnosticado con Diabetes y tener un mal control de la glucosa.
2- Tener entre 20 y 50 años.
3- Ser mujer.
Algunos de los síntomas para identificar este problema son:
-Falta de energía física o muscular.
-Dificultad para concentrarse.
-Depresión.
-Cansancio intenso, físico y mental.
-Lentitud de pensamiento.
-Trastornos del apetito.
-Decaimiento.
-Estrés.
-Dolores cambiantes en el cuerpo.
-Irritabilidad.
-Intolerancia al ruido y a la luz intensa.
-Cualquier tipo de alteración del sueño (insomnio o somnolencia).
A partir de estos rasgos, se puede confirmar que no sólo se trata de fatiga sino de astenia. Lo primero que hay que hacer es saber qué tipo de Diabetes se tiene, por ejemplo, si se tiene tipo 1, el problema se puede deber a las altas y bajas de glucosa, por lo que hay que verificar el control que se está llevando con la insulina.
El buen control de la glucosa es lo más importante para evitar astenia, acompañado de una buena alimentación y hábitos saludables.
Tratamiento
Lo ideal para la astenia cuando se padece Diabetes es lograr un buen control de la glucosa. Además, el Médico puede recomendar tomar lactato de magnesio de 750 mg después de cada alimento.
Este medicamento, tanto en la Diabetes tipo 1 como en la tipo 2, evita la resistencia a la insulina y convierte en energía los radicales libres que ocasionan la astenia. En este sentido, no es que la gente se cure, pero la fatiga desaparece.
Dicho fármaco no debe consumirse por más de tres meses continuos, pues podría generar estragos en el organismo. El Médico decidirá el tiempo que debe tomarse.
Si el primer tratamiento fracasa, existe el malato de citrulina, que es la enzima deficiente en el paciente con Diabetes, pero por sus efectos secundarios se requiere de receta médica controlada para adquirirlo.
Fuente: diabetesbienestarysalud.com